Casar de Cáceres

Casar de Cáceres: cultura pastoril

Testigo del paso de numerosas culturas, es también un referente para peregrinos que llegan desde Cáceres en ruta hacia Santiago y hacen parada y fonda en uno de los lugares destacados del Camino de Santiago. La cultura pastoril y trashumante acompaña al viajero que encuentra en el Museo del Queso Torta del Casar un espacio para descubrir la historia y el proceso de elaboración de tan exquisito producto, seña de identidad y reflejo del buen hacer de la tradición ganadera de sus gentes y cuyo origen se remonta a épocas feudales y al Privilegio Real otorgado por Sancho IV. Ubicado en una casa típica, el centro museístico guarda la sabiduría y el secreto del proceso de elaboración de la afamada Torta del Casar mostrando con detalle el modo de vida de las familias dedicadas desde antaño a su producción artesanal.  La arquitectura popular ha sabido conservar toda su esencia en el trazado callejero de Casar de Cáceres, adornado con calles salpicadas de sencillas fachadas, casas encaladas decoradas con granito en puertas y ventanas, y arcos como los que encontramos en la Plaza de España, bajo el albergue de peregrinos y frente al ayuntamiento.  Los cinco pasadizos del municipio, ubicados en las intersecciones entre calles y travesías, son un elemento arquitectónico relevante del urbanismo local que, en contraste con la arquitectura tradicional casareña, y en perfecta armonía con ella, ha dado paso a edificios de inspiración modernista.

Torta del Casar o la tradición artesanal

Es un queso que se abre por arriba, retirando la tapa, como si se tratara de una lata de conservas, y luego se unta en un pedazo de pan de pueblo. La Torta del Casar es una de las muchas exquisiteces con las que nos obsequia Extremadura.